Nora Strejilevich en Human Rights Quarterly 28 (2006) PP. 701-713. The John Hopkings University Press
Facultad de Estudios Generales, Ciencias Sociales
Universidad de Puerto Rico, Recinto de Rio Piedras
En este artículo se defiende con elocuencia el lugar que ocupan las voces testimoniales en la relación con la verdad de los eventos narrados, por oposición a lo que serían las reglas de veracidad del aparato discursivo científico, académico o legal. La autora es una escritora argentina exiliada en Canada tras sobrevivir el terror de estado bajo la dictadura en Argentina. Para Strejilevich, el testimonio lejos del discurso científico-académico de verdad, es más bien un medio de escritura y narrativa que da voz a los aspectos de la intimidad y de la subjetividad, que permite por su propia forma atender “la dimensión profunda del terror”. En este texto se hace una defensa del testimonio como un registro de la verdad diferente a las historias objetivadas, legitimadas en los mundos académicos. Para su autora, el testimonio puede proveer conocimiento por medio del ejemplo como modelo o paradigma del estado de excepción. Dice Strejilevich, que la verdad de los testimonios de las víctimas de violencia extrema, aún cuando no impidan la reiteración del evento, es una de las reservas de dignidad dejadas a la humanidad. En un sentido, todo testiminio es una forma muy concreta de reiterar la superioridad ética (no de las víctimas), pero sí de éstos testimonios frente a la máquina de los totalitarismos. No es la objetividad lo que debe buscarse en el testimonio sino más bien veracidad (truthfulness). Las consideraciones que trae esta autora se añaden a una larga lista de debates entre quienes defienden la obligación ética de considerar la veracidad inherente a la literatura testimonial de las víctimas de violencia, de otros que tienden a problematizarlas por considerarlas poco objetivas, y faltas de evidencias. Un debate importante si consideramos que la era moderna de la segunda posguerra a sido descrita por varios autores como la era del testigo. En ese sentido, la escritura testimonial constituye una parte significativa de las demandas de justicia del presente, no exenta por lo mismo, de controversias. Desde ese lugar de reflexión, utilizo este artículo en mi investigación sobre la figura de la víctima.