
Departamento de Ciencias Sociales
Universidad de Puerto Rico, Recinto de Arecibo
21 de septiembre de 2014
En este libro Slavoj Žižek desarrolla distinciones necesarias como la de violencia subjetiva (la ejercida por un agente claramente identificable y que suele ser la única a la que echan mano los medios de comunicación y los dispositivos de control; incluyendo los discursos bien intencionados de los comunistas liberales y el humanitarismo) y la violencia objetiva (invisible pues se trata, por un lado, de la violencia simbólica vinculada al universo de sentido que impone el lenguaje y, por otro lado, de la violencia sistémica vinculada a la estructura de nuestros sistemas político-económicos). Esta última irriga el contexto de violencia-cero que hace perceptible la violencia subjetiva de un hecho. Abordarla requiere entonces de la reflexión, del pensar, de la conceptualización y de la teoría. Žižek propone que hay que resistir a la fascinación por la violencia subjetiva porque ella no es sino la más visible de las tres violencias. Contra la tendencia a postular una urgencia por actuar en contra de la violencia, Zizek opta en este libro por detenerse a reflexionar. Entre otros temas, estas reflexiones abordan los límites de la noción de tolerancia, el miedo al prójimo y la propia política del miedo que solo deja lugar para la despolitización de todo y la gestión eficaz de la vida nuda. Las seis reflexiones en este libro aportan consideraciones de índole epistemológica importantes para el estudio de la violencia.